Vida Diaria
LAS AFLICCIONES
Hay circunstancias que no podemos evadir en nuestra vida y una de ellas son las aflicciones, Ahora bien, como define el diccionario aflicción “Aflicción es la acción y el resultado de afligir o afligirse. Hace referencia a un profundo sentimiento de tristeza, pena, dolor o sufrimiento.”; ahora veamos como lo define el concepto bíblico “La aflicción en la Biblia se entiende como un sentimiento de amargura, tristeza y pesar. Se trata de un estado temporal ya que Dios aparece como la solución para ese sentimiento.” Pareciera que hay una pequeña diferencia en ambas definiciones, pero esta marca grandemente el rumbo o dirección que tomamos en medio de las aflicciones.
Salmos 23:4 “Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo; tu vara y tu cayado me infunden aliento.” Cuando nos encontramos en aflicciones, sentimos que algo nos ahoga, no vemos soluciones, muchas veces vienen sentimientos de soledad o desesperación, es porque estamos viviendo bajo la sombra de aquello que nos agobia y nos esta llevando a ver que hemos quedado cercadas por las situaciones difíciles que se esta pasando. Pero este versículo dice “tú estás conmigo” esta es la realidad para el creyente, por lo cual este tiempo, aunque es difícil de sobrellevar es necesario para que podamos darnos cuenta que Dios es fiel, es quien nos sostiene, quien nos acompaña en ese tiempo de oscuridad, El es real, no es un sentimiento que se mueve conforme a circunstancias, es un Dios vivo y verdadero que tiene el control de las circunstancias.
Muchas se preguntarán ¿Si estoy en Cristo porque debo pasar por aflicciones? El caminar en Cristo no nos garantiza que las aflicciones pasaran, Cristo tuvo que pasar por diferentes situaciones difíciles para llevarnos a la redención, nosotras como hijas de Dios debemos aprender a caminar en esa redención la cual nos lleva a ser justificadas y limpiadas de todo pecado, y para ello es necesario quitar toda aspereza en nuestra vida.
2 Corintios 1:4 “el cual nos consuela en toda tribulación nuestra, para que nosotros podamos consolar a los que están en cualquier aflicción con el consuelo con que nosotros mismos somos consolados por Dios.” Cuan importante es que entendamos que las aflicciones nos ayudan en:
1.- Aprender que no estamos solas, el Señor nos consuela y fortalece para pasar por las aflicciones, Dios, en cada aspecto de su ser, está lleno de consolación, fuerza, y de ayuda hacia nosotros. El propósito es pulirnos, formarnos y hacernos instrumentos de bendición para otros.
2.- Las aflicciones nos llevan a quitar de nosotros todo aquello que nos dan seguridad y que nos desvían de la confianza en el Señor, para llevarnos a poner la mirada en Dios en medio de la situación rindiéndonos totalmente a Él, esto nos enseñan cuán importante es caminar en obediencia, fortalece nuestra fe en Dios y reafirma nuestra vida para caminar en santidad y justicia, porque en la medida que lo hacemos vamos creciendo y madurando, además vamos aprendiendo a caminar en medio de las aflicciones con un corazón confiado.
3.- Tiene el propósito de capacitarnos para dar consuelo a otros, ya que este no solo lo recibimos, sino que también podemos darlo a otros. Además, podemos ser de ayuda a través de nuestra experiencia para que otras personas que están pasando por momentos difíciles para que experimenten el consuelo, misericordia y amor de Dios, y no se desanimen con facilidad.
Cuan importante es tener presente que las aflicciones son el instrumento que el Señor usa para formar un carácter integro como creyentes, para limpiar nuestra vida de todo aquello que pueda ser estorbo para nuestra relación con El, y para aprender con sumo gozo cuando nos ayeemos en diversas pruebas como dijo el apóstol Pablo, esto es una señal que estamos siendo formadas, por lo cual no dejemos que el abatimiento nos atrape, sino seamos agradecidas con un Dios amoroso que nos quiere llevar a un carácter perfecto en Cristo Jesús. Santiago 1:12 “Bienaventurado el hombre que persevera bajo la prueba, porque una vez que ha sido aprobado, recibirá la corona de la vida que el Señor ha prometido a los que le aman.”
Por Sandri de García
Sandra Lizeth Recinos Perera de García, 22 años de casada, madre de 2 hijos. 35 años cristiana, Graduada de Instituto Bíblico Jesucristo en BACCALAUREATUS EN TEOLOGÍA.
Ha trabajado con diferentes grupos a nivel ministerial desde 1996, ministrando, enseñando y aconsejando, estuvo de misionera durante once años en Colombia, actualmente es parte de Iglesia Cristiana Jesucristo, donde tiene el privilegio de apoyar en ministerio de damas y niños
Comments